En los últimos tiempos nos estamos acostumbrando a las noticias ‘fakes’ en Internet, a tratar de detectarlas y actuar contra ellas. Pero, ¿qué hay de los equipos de baloncesto ‘fakes’? o mejor aún ¿qué hay de las selecciones nacionales ‘fakes’? Lo que pasó en Perm (Rusia) podría ser el guion de una película de ficción (quizá lo sea algún día) pero es la surrealista realidad.
Rusia, que lleva sin jugar partidos internacionales desde que se inició su invasión a Ucrania, quiso montar un campeonato de baloncesto a escala mundial (dentro de las limitaciones) y organizó un torneo amistoso de baloncesto con la selección rusa, el Parma BC de la ciudad rusa de Perm, y las selecciones nacionales de Venezuela y Colombia.
Todo parecía ir sobre ruedas cuando el nivel de la selección colombiana en el primer partido hizo saltar las alarmas: ¡41-2 en el primer cuarto para el equipo local del Perm!. El partido acabó con un sonrojante y alarmante 155-53 para el equipo ruso. En el segundo partido, más de lo mismo: 107-58 derrota de los colombianos ante Venezuela. Parecía una burla… lo era en realidad y el torneo quedó suspendido.
Poco después la federación colombiana emitió un comunicado oficial para confirmar que no se trataba de un equipo nacional salido de su federación ni de un equipo de formación. Era una equipo sin vinculación alguna con la FCB. Además la federación anunció que tomaría medidas legales contra el torneo por el uso indebido de su imagen, su logo y la bandera de Colombia.
Por su parte, el presidente de la federación rusa, el ex NBA Andrei Kirilenko, trató de explicar poco después la actuación de su federación en la organización de la Copa de la Amistad en Rusia: «Nos gustaría enfatizar que todas nuestras interacciones con el equipo colombiano se llevaron a cabo exclusivamente a través de canales de comunicación oficiales.
Nuestra posición sigue siendo la misma: todas las comunicaciones y coordinaciones se realizan solo a través de fuentes verificadas y oficiales», señaló Kirilenko a los medios de comunicación.
Lo que se ha sabido es que todo el enredo partió de la mente de Christian David Mosquera Duran, un colombiano residente en Rusia y que en la foto del equipo aparece con el número 6.
Mosquera Durán hackeó la cuenta de correo de la federación colombiana y logró engañar a los organizadores rusos, cuyo pecado, claro, estuvo en no comprobar la identidad de los jugadores colombianos antes de los partidos.
Mosquera Durán, que engañó además a la organización para conseguir billetes de avión para sus amigos (los del equipo) y alojamiento en hoteles de cuatro estrellas, es un jugador de la tercera división de baloncesto 3×3 en la competición local de Kazán, por lo que uno se puede hacer idea del nivel de baloncesto de la falsa selección colombiana.
El Golpe.
Del 21 al 25 de agosto se celebró el Torneo de la Amistad en Perm (Rusia). Contaba con la presencia del BC Parma (el equipo local que juega en la primera división rusa), y los combinados nacionales de Rusia, Venezuela y Colombia. Pero algo no cuadraba.
El BC Parma… pic.twitter.com/QZh5ZNNOH7— Niporwifi © (@niporwifi) August 29, 2024
Jorge Quiroga
Diario Marca